EMOR – אמור

Vaikra ( levìtico 21-24)
Haftara Iejezquel 44:15-31
Brith Jadasha 1Pe 2:4-10

En esta parasha se hace mención a determinadas reglas sobre la esposa que podìa tener
un Kohen ( sacerdote) a saber:
-La hija de un kohen nacida de una uniòn no permitida para èl.
-Una mujer que ha tenido relaciones prohibidas.
-Una mujer que haya sido rechazada por su marido.
Como en todos los casos, es importante entender la intenciòn de lo que esta redactado en la Escritura, y en este caso en particular podemos observar la importancia que Di-s da a la pareja, que es el  primer eslabón de la familia.
Los pensamientos de un hombre estan influenciados por los de su esposa, sus estados de ànimo tambièn, y sus proyectos y progresos tendràn una marca que proviene del tipo de uniòn conyugal.
En le caso de un sacerdote, el cual es guìa de la comunidad, el equilibrio de la relaciòn marital lo ayudarà en su desempeño. Pero a su vez, la santidad de la mujer elegida es
primordial para sostener la relaciòn.
Dos personas que pertenecen a mundos distintos no tienen proyectos en comùn, no comparten sus vidas plenamente, y sus àreas ( fìsicas, emocionales y espirituales) nunca
logran conformar una unidad estable.
El amor es el primero de los eslabones de una relaciòn duradera, pero no es el ùnico.
Se necesita la comprensión, el perdòn y una cosmovisión similar de la vida como para convivir con éxito y poder superar las distintas etapas de un matrimonio.
Nos queda por preguntar por que no hay condiciones expuestas para que la mujer acepte a un kohen como marido?
Para ella, seguramente ser señalada para matrimonio era un privilegio,y generalmente no se rehusaba. Pero puede ser que el kohen no tuviera la suficiente excelencia para oficiar? En este caso el Sanedrín se encargarìa de encaminarlo o de expulsarlo de la Comunidad.
Para nuestros tiempos, la elecciòn y mantenimiento de la pareja conyugal tiene la misma
importancia y alcance, y para Di-s el mismo valor.
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino Mesianico

EMOR – Di (2)

Toda sociedad para convivir requiere de organización y planificación.  Asi la Torá nos lleva por la descripción de los requisitos mínimos para todo cohen (sacerdote) y a esto sumado las del Cohen Gadol (Sumo Sacerdote).
Llama poderosamente la atención que hayan versículos que detallan imposibilidades físicas como impedimentos de poder ofrecer sacrificios en el Mishcan (Tabernáculo).
Nuestros sabios dedujeron que esto se relacionaba con los pueblos paganos que circundaban a Israel.  En ellos los hombres con problemas físicos eran los encargados de los Templos.
Yendo más lejos en nuestra parasha veremos que Adonai expresa que los animales con problemas físicos o enfermedades no son aceptados para las ofrendas.
Las ofrendas requieren del hombre lo mejor que posea y no lo que no le sirve en su rebaño.
La sociedad debe darle el lugar a D-os que le corresponde dignificando lo mejor de ella para el Creador.
Ahora bien, el respeto de una sociedad es la suma del respeto que cada uno de sus individuos tiene.  Sin respeto no hay consideración hacia el otro.  Por ello es que al final de esta parasha se narra el castigo de muerte a un individuo de una sociedad que “pronunció y profanó el nombre de Adonai”.
Lo mejor de cada uno de nosotros debe ser dado a D-os, para que nuestra sociedad se vuelva digna de ser aceptada por El.

Iosef Shemi
Rabino Mesianico

EMOR (3)

Las mitzvot, mandamientos, que se dictan en esta parasha para los cohanim, sacerdotes, son mitzvot que una vez mas ponen relieve sobre lo tame, puro, y lo tahor, impuro.
De todas ellas, quisiera resaltar la que pide que no se impurifiquen con una persona muerta.
Si bien, hay diferencias en el pedido de Di-s respecto al Cohen Gadol, Sumo Sacerdote, y a los Cohanim, los sacerdotes, queda claro que la importancia que esto recobra debe ser tenida en cuenta para no impurificarse.
Los pueblos de la antigüedad, los que le siguieron, y los de la actualidad, se ocupan de la muerte de los seres queridos de diversas maneras.
Estas van desde mausoleos hasta cementerios privados, desde oraciones hasta invocaciones por el espíritu que ya no esta entre esos huesos y esa carne, que ya no tiene vida.
Como vemos, la comodidad de los vivientes , vivientes?, de este mundo trata de hacer de la línea final de nuestra existencia material un hermoso recuerdo, imágenes, estatuas, cuadros, etc., nos recuerdan a quienes antes que nosotros , una vez estuvieron en este mundo. La Tora nos dice que nos alejemos de la adoración a la muerte, de la búsqueda de intrigantes pensamientos sobre el después, y que nos consagremos a la vida.
Claro, consagrarse a la vida implica caminar entre los muertos, aquellos seres vivientes que poseen la inagotable sed de vida, sed de desplegar su dimensión espiritual, sin la cual no somos más que sepulcros con movimiento, hombres miedosos del futuro, sintiéndonos al borde de un precipicio por la aparición repentina de la muerte.
Parasha Emor, continuara dándonos el sentido de nuestra existencia, nombrando las festividades y las ofrendas respectivas, así el ciclo de la vida toma real sentido, de la Vida venimos y a la vida Vamos, y entre ambas instancias, el desafío de ascender desde el polvo de la tierra hasta desarrollarnos y dejar atrás el polvo de la tierra.
Los Sacerdotes en Israel honran a Di-s honrando la vida, como judíos mesiánicos debemos honrar a Di-s honrando la vida, dándole a ella el valor que posee, elevándonos desde la miseria del egoísmo al principio mayor : la Vida Interior. Esa pequeña luz que nace en nuestro corazón cuando percibimos la realidad de la dimensión espiritual, ha de crecer tanto que alumbre todo nuestro accionar.
La luz de Yeshua HaMashiaj es quien despierta en nosotros la apertura a la Vida Interior, única forma, camino y dirección que nos permite realmente vivenciar las mitzvot por El y no por y para nosotros.
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico

EMOR (4)

Profanar o Santificar el Nombre Divino son dos opciones de esta parasha.

Profanar ,Jilul HaShem, es vaciar de contenido lo que el soplo divino a llenado: La Creación.
Santificar el Nombre Divino es volver a su lugar lo que corresponde al Cread-r: la admiración de su plenitud.
Los actos de intento de vaciamiento de la presencia divina son los externos a nuestro ser más interno: el robo del honor divino, la hipocresía en la adoración, la vida externa, las metas falsas del éxito externo.
Los actos de intento de Santificación del Nombre Divino son los opuestos: el respeto, el honor, la claridad de vida, la profundidad de la intención en los actos.
Muchas veces no podemos ver que estamos haciendo algo incorrecto…aun así la intención por el otro y el amor al otro son determinantes para ayudarnos a actuar correctamente. Queda claro en toda la lectura de esta semana que solo la vida es acompañada por la vida, que cada acto debe ser contenido en el honor que le debemos a Di-s, y que lo mas trágico para el alma es alejarnos del Cread-r.
Superar el propio vacío, de creencias, preguntas, inseguridades y violencia , es lo que nos une en un camino sin retorno a la adhesión con Di-s, no importa cuanto tiempo esto nos tome, el fin esta asegurado por el mismo amor Divino.
Por ello es que Yeshua HaMashiaj aclaró que solo la no teshuva por el Nombre Divino es lo que nos conduce a la separación con el Cread-r.
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico