Vayeshev

Tora : Bereshit ( génesis) 37:1-40:23
Haftara: Amos 2:6-3:8
Meshijei ketuvim (Escritos mesiánicos): Hechos 7:9-16

La vida de Iahacob seguirá la senda que tuvo siempre, nuevas experiencias le vienen, ahora apuntará Bore Olam, el creador, ha trabajar los sentimientos mas íntimos de él. Su hijo preferido, el que será su valuarte será eliminado por sus propios hermanos. La trama es muy conocida, en una decisión de diez contra uno, basada en el odio y la envidia, es vendido como esclavo. A Iahacob le muestran la vestidura desgarrada de Iosef con manchas de sangre de un cabrito, y le preguntan: reconoces que esto.
Mas tarde, Iehuda en un encuentro con Tamar, su nuera que era cananita ( sobre lo cual hay innumerables explicaciones), la deja embarazada, y cuando se produce un juicio contra ella, ella que se vestió y presentó como prostituta, muestra la garantía que le había solicitado a Iehuda por el pago del encuentro íntimo, y le dice: reconoces esto.
Así vemos como todo arreglo fundado en el mal, la envidia, el odio y desvalorización del otro, tiene la consecuencia contraria a la esperada. Iahacob mostró su amor en demasía por Iosef, le fue quitado por veintidós años, Iosef hablo mal  de sus hermanos sin decirselo a ellos, fue rechazado y eliminado de la familia, sus hermanos lo vendieron y odiaron, deberán volver a Iosef como siervos y reconocer el error, Iehuda debió reconocer en público lo que en público le hizo reconocer a su padre, la infamia de la mentira.
Y en el medio de esta historia y entramado de peleas familiares, surge la luz divina: te Tamar , la cananita, y Iehuda, descenderá  el Hijo de David, el Mesías.
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino