AJAREI MOT

Vaikra 16:1-18.30
Haftará Ezequiel 22:1-19
Brit Jadasha Hebreos 9:11-28; 1 Pedro 1:13-16
Después de la muerte de los hijos de Aharon, Nadab y Aviu, que se acercaron a Adonai con esh jara (fuego extraño), D-os enseña cuando y como ingresar en el Kodesh Hakadoshim (el lugar santísimo del Mishcan, tabernáculo).  Una vez al año y con sacrificios Hattat y Olá (expiación por él y su familia), el Cohen Gadol vestido con una túnica de lino emigraba al Kodesh Hakadoshim.  Luego de verter la sangre de estos esparcían ktoret (incienso) sobre el propiciatorio (cobertura de oro del Arón Hakodesh, arca sagrada), puesto que desde los querubines que estaban por sobre el Aron Hakodesh Adonai se revelaba a Moshé.
Oculto entre estos simbolismos surge un elemento raro, el Cohen Gadol debía tirar suerte sobre dos machos cabríos, uno sería para Adonai que expiaba por el pueblo y el otro para Azazel, que también expiaba por el pueblo.
Sabemos que la sangre expía los pecados, en este momento de la Revelación Divina; lo que al cabo del tiempo es confuso es porque se confesaban los pecados del pueblo sobre el chivo que se enviaba al desierto para Azazel, y más aún quién es Azazel.  Se ha tratado de resolver esto con innumerables midrashim y hagadot (explicaciones basadas en versículos bíblicos e historias de orden folklórico).
Hay un elemento que tal vez arroje luz sobre este animal, se ataba un hilo de cordón púrpura al cuello y otro al dintel del Mishcan.  Cuando el animal llegaba al desierto y D-os aceptaba esta ofrenda el hilo de color púrpura que estaba atado en el  Mishcan se volvía blanco.
Entonces queda claro que la sustitución de la culpa estaba representada por el chivo. Kahal Israel (la comunidad de Israel) era perdonada mediante este acto.
El Talmud nos cuenta que este chivo era arrojado desde una elevación a fin de que muera y su sangre expíe a Israel.
Pero ¿quién es Azazel?  El demonio que habitaba en el desierto, los ángeles Az y Azahel, ángeles que antes del diluvio se unieron con los hombres y cometieron todo tipo de depravaciones), etc, etc.
Nosotros, los judíos mesiánicos tenemos una óptica más simple.  El mal que cargaba ese chivo expiatorio purificaba a Israel.  Era necesaria la muerte fuera de Kahal Israel para que sea aceptada por D-os, era un sacrificio claramente sustitutorio de los errores de Israel, y no podía ser un sacrificio para Satán, sino más bien por Satán.  El Mashiaj que murió sacrificialmente por nuestros errores, fue conducido hasta una elevación, y en su muerte venció a Satán, el mal: resucitó y ahora purifica los errores de quienes le tienen vivo en su corazón.